Porque el tiempo pasa, pero nunca es tarde para ser feliz.
Lo sé cada vez que te miro, lo saboreo cada vez que te beso, lo leo en tus pupilas cuando callas y lo siento cuando el mundo entero nos observa con recelo, sabedores de lo dichoso que es nuestro amor.
Que miren y miren, que se mueran de envidia; nosotros seguiremos enloqueciendo con los años y con los pasos que irremediablemente nos obligue a dar la vida. Así es, amigo mío, el amor es una locura. Es adrenalina en estado puro. Para algunos es una droga fuertemente adictiva; pero sólo éstos últimos se encontrarán con un amor autodestructivo y desolador.
En cambio tú y yo, que tan solo nos dejamos arrastrar por el deseo y la atracción que trazan nuestras miradas no corremos ningún tipo de riesgo. Somos libres.
Chicas, me encanta vuestro blog. Seguid escribiendo! :)
ResponderEliminar